Disfunciones sexuales femeninas y masculinas: comparación de género en una muestra de la Ciudad de México
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Abstract
Las disfunciones sexuales constituyen un problema frecuente y que es necesario estudiar por su importancia para la salud de los individuos. Por esto, abordar la sexualidad, conocer su prevalencia en mujeres y en hombres en una muestra de población de la Ciudad de México, y establecer la frecuencia con que se presenta cada una de ellas brindará la posibilidad de proponer estrategias de atención más precisas y focalizadas, además de generar líneas de investigación para estudiar los factores asociados a ellas. Masters y Johnson estudiaron el comportamiento del ciclo de la respuesta sexual humana, y lo dividieron en cinco fases: deseo, excitación, meseta, orgasmo y resolución. La definición de estas fases los llevó a describir y delimitar las disfunciones sexuales inherentes, aunque no siempre presentes, de la sexualidad humana. A su vez, Rubio las define como “una serie de síndromes en los que los procesos eróticos de la respuesta sexual resultan no deseables para el individuo o para el grupo social y que se presentan en forma persistente y recurrente”. En el Departamento de Psicología del Instituto Nacional de Perinatología (INPer) de la Ciudad de México, se planteó la necesidad de conocer el comportamiento de los problemas sexuales con el fin de tener un panorama completo y no hipotético de lo que sucede en una población mexicana, con determinadas características, con respecto a su prevalencia, sus tipos y su comparación de género. Objetivo: Establecer la prevalencia, el porcentaje y la frecuencia de los tipos de disfunción sexual masculina y femenina, así como sus diferencias, en una población de la Ciudad de México. A la vez se analizan algunas variables relacionadas con la vida sexual de la muestra: información sexual recibida, experiencias sexuales traumáticas y trauma infantil. Material y método: Se utilizaron la Historia clínica de la sexualidad femenina y el Cuestionario de Sexualidad, versión hombres. Estudio de población, exploratorio, descriptivo, transversal, retrospectivo, con un diseño no experimental, de dos muestras del INPer -una de 384 mujeres y otra de 363 varones (no parejas de las pacientes que se incluyeron en la muestra)- clasificadas cada una en grupo 1 sin disfunción y grupo 2 con disfunción sexual. Los sujetos se seleccionaron y se integraron a los grupos después de ser aceptados en la institución como pacientes y antes de cualquier intervención médica. El tamaño de la muestra fue representativo del número de pacientes que ingresó a la institución ese año. Tanto las mujeres como los hombres debieron cubrir todos los criterios de inclusión. Los pacientes se incluyeron en el grupo 1 (grupo control) sin disfunciones sexuales o en el grupo 2 (grupo experimental) con disfunciones sexuales, según el resultado de las historias clínicas de mujeres y hombres, cuyo objetivo es determinar la presencia o ausencia de disfunciones sexuales y el tipo de disfunción que se padece. Las diez categorías son las disfunciones sexuales descritas en el DSM-IV-TR. Resultados: La prevalencia de disfunciones sexuales en mujeres fue de 52% y en hombres, de 38.8%. En promedio, en el grupo de mujeres con disfunción sexual se presentaron 2.52 disfunciones por paciente y en el grupo de hombres con disfunción sexual, 1.48 por hombre. Las más frecuentes fueron la disritmia en ambos grupos, el deseo sexual hipoactivo en el grupo femenino y la eyaculación precoz en el grupo masculino. En las variables relacionadas con la vida sexual, el trauma infantil en mujeres se asoció con la presencia de disfunciones sexuales, la práctica masturbatoria en hombres al grupo sin disfunciones sexuales y la falta de información sexual se asoció en ambas poblaciones con el grupo con disfunciones sexuales.
Keywords:
disfunción sexual, epidemiología y género